Conversion de San Pablo

Published 11:22 am Friday, January 23, 2009

La cercana de Dios nos pide siempre un nuevo cambio: todos somos pecadores.

A veces no resulta cmodo decir a una persona que tiene que cambiar. Por eso hay quien se resiste a hablar claro a los dems. Esto le suceda al profeta Jons, que pensaba que no le iban a hacer caso.

Pero acab predicando la conversin en Nnive (la actual Bagdad). Él se resista a ir para all, y el Señor tuvo que llevarlo en el interior de una ballena, inventando as el primer submarino de la historia.

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Conversin en medio oriente

Era necesaria la conversin de los ninivitas. Tenan que cambiar la mala vida que llevaban. Y para eso un hombre deba decirlo, porque el Señor utiliza instrumentos (cfr. Jon 3,1-5.10: primera lectura de la Misa).

Conversin en occidente

Ahora es necesario que se dé un cambio en nuestra vida. Pero si vemos que no lo necesitamos –como le ocurra a los de Nnive– entonces es que nuestra conversin debe ser ms urgente todava.

Puede ser que Dios enve a alguien para que nos diga: –No eres excesivamente malo, pero tampoco eres excesivamente bueno. Te ests volviendo tibio.

Aunque con toda seguridad nuestra vida no ser as, porque vivimos como cristianos. Pero=2 0puede ser que nos dé miedo corregir, meternos en la vida de los dems .

Pequeño Jons

Si huimos de colaborar en la conversin de los dems seramos como Jons. La palabra «metanoia», conversin, puede sonarnos a griego, porque no queremos saber nada de las enfermedades ajenas.

Pero a los cristianos el Señor nos ha puesto como médicos de urgencia: la gente que tenemos a nuestro alrededor necesita de nuestra ayuda. Y hay que darse prisa porque como dice San Pablo «la representacin de este mundo se termina» (en segunda lectura de la Misa: 1Co 7,29-31).

La Receta

Es tan importante anunciar la conversin que esto fue lo primero que hizo Jesús: Él iba predicando «convertos y creed en el Evangelio».

Si queremos que la gente cambie de verdad hay que hablarles del Evangelio. Y el cristianismo se puede resumir en tres palabras: amistad con Jesucristo. Esto es lo importante porque no se puede conseguir metanoia sin receta.